JlA 7×45 Descubriendo el fascinante mundo del neón

El neón es ese gas noble y un tanto escurridizo que fue descubierto allá por mil ochocientos noventa y ocho por dos personajes, William Ramsey y Morris Travers. A pesar de ser el quinto elemento más abundante en este vasto universo, encontrarlo en la Tierra es como buscar una aguja en un pajar, ya que solo se halla en nuestra atmósfera. Esto hace que lo valoremos, un poco como el oro del aire.

¿Alguna vez has visto un globo lleno de neón? Flota igual que uno con helio porque este gas es más ligero que el aire. Sin embargo, si alguna vez te topas con uno, ¡no lo inhales buscando sonar como un alienígena! El neón transforma la voz, claro está, pero no con la eficacia cómica del helio.

Ahora, para los más atrevidos y con formación adecuada, experimentos científicos mezclan neón con hidrógeno para crear explosiones controladas. La clave aquí es ver cómo se comportan los electrones del neón cuando se les da un buen empujoncito térmico. También descubrimos que si le das una descarga eléctrica al neón, este emite una luz roja bastante característica, ideal para esos luminosos letreros de ‘open’ que vemos en las películas.

El neón no es un gas fácil; tiene tres isótopos y el neón veinte se lleva el protagonismo por su abundancia. Congelar este gas y otros similares es una proeza que requiere temperaturas muy bajas y grandes cantidades de helio, ese gas noble que duele más al bolsillo que en la garganta.

Para hacer todo esto más divertido, propongo un reto: crear un experimento casero donde influyamos en la voz usando solo objetos caseros. De esta forma, podremos entender cómo distintos gases afectan a la frecuencia de nuestra voz. Eso sí, todos los gases deben ser seguros y siempre con la guía de un adulto responsable.

Si te ha picado la curiosidad y quieres más sorpresas como estas, te invitamos a visitar JeiJoLand, donde juego y aprendizaje se dan la mano. ¡Nos vemos allí!